Un artista gráfico privilegiado.
Por los periódicos tuve conocimiento del reciente fallecimiento de Eguillor, un magnifico artista gráfico que supo tomar el pulso a la sociedad con sus “tiras” humorísticas. La obra de Juan Carlos Eguillor (Nacido en San Sebastián y afincado en Bilbao, aunque últimamente vivía en Madrid- España-) me parece un exponente muy interesante del concepto de artista global.
Por un lado supo mantener ese equilibrio tan inestable que consiste en conjugar la “modernidad” y la identidad con sus raíces, esa difícil tarea de armonizar lo local con lo universal y por otro, utilizando referentes como el “ pop art” y hasta manifestaciones conceptuales, pudo acercarse al gran público elaborando mensajes muy accesibles.
Versatilidad, humor y sencillez han sido los pilares de su obra, que le han permitido hacer desde un cartel para fiestas populares, hasta ilustraciones para libros infantiles, pasando por el más sofisticado arte electrónico o una sangrante “tira” cómica de contenido político.
Por un lado supo mantener ese equilibrio tan inestable que consiste en conjugar la “modernidad” y la identidad con sus raíces, esa difícil tarea de armonizar lo local con lo universal y por otro, utilizando referentes como el “ pop art” y hasta manifestaciones conceptuales, pudo acercarse al gran público elaborando mensajes muy accesibles.
Versatilidad, humor y sencillez han sido los pilares de su obra, que le han permitido hacer desde un cartel para fiestas populares, hasta ilustraciones para libros infantiles, pasando por el más sofisticado arte electrónico o una sangrante “tira” cómica de contenido político.
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